En el mercado libre los consumidores de electricidad contratan su suministro a una empresa comercializadora libre, pactando libremente su tarifa con la misma.

En el Mercado Regulado, o Mercado a Tarifa, los consumidores contratan su suministro a una distribuidora con una tarifa eléctrica que el gobierno fija cada tres meses. Actualmente, estos consumidores contratan su energía a una tarifa denominada PVPC (Precio Venta Pequeño Cliente) y las facturas se las envía su comercializadora.

El PVPC, o Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor, es una tarifa de luz por horas regulada por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo. El precio de la tarifa PVPC se regula cada hora en función de la oferta y demanda de electricidad diarias. Pueden tener acceso a la tarifa PVPC todos aquellos puntos de suministro con una potencia contratada de hasta 10 kilovatios (kW). Con una potencia contratada media de entre 3,45 y 4,6 kW, la tarifa PVPC esta disponible para una amplia mayoría de consumidores domésticos.

Plenitude pertenece al mercado libre, permitiendo así que cualquiera pueda contratarlo eligiendo la tarifa que mejor se adapte a sus necesidades.

Se trata de una medida de carácter social diseñada para favorecer a los colectivos más vulnerables. Concretamente se trata de la congelación de la tarifa vigente desde el momento de la puesta en marcha del PVPC hasta 2012.

Pueden acogerse al bono social cuatro colectivos:

• Los clientes domésticos (residencias) con una potencia contratada inferior a 3 KW.
• Los pensionistas con prestaciones mínimas.
• Las familias numerosas.
• Los hogares en los que todos sus integrantes se encuentren en situación de desempleo

Las empresas generadoras son las encargadas de producir la ENERGÍA eléctrica en sus plantas de producción, y de inyectarla en la red de transporte de ENERGÍA eléctrica. Estas plantas de producción pueden ser de varios tipos: centrales de gas, centrales térmicas, centrales nucleares, centrales hidráulicas o plantas de producción de electricidad que utilizan energías alternativas o limpias.

Red Eléctrica de España (REE) es la encargada de transportar la ENERGÍA en alta tensión (no apta aún para el consumo) y gestionar, mantener y reparar las infraestructuras necesarias para ello.

Una distribuidora es la propietaria del cable que llega hasta el hogar del consumidor y del contador. Por ley, desde el 1 de julio de 2009 debe dedicarse únicamente a construir, mantener y operar las redes de electricidad, así como a leer los contadores y facilitar el servicio de averías 24 horas.

Una comercializadora, como por ejemplo Plenitude, es la empresa que vende la energía eléctrica que circula por la red de las distribuidoras. Por ley, desde el 1 de julio de 2009 es la encargada de la facturación de la energía eléctrica.

ICP son las siglas para Interruptor de Control de Potencia. Este interruptor, instalado por la compañía suministradora de energía en la puesta en marcha de la instalación eléctrica, controla la potencia que has consumido en cada momento. De esta forma, cuando dicha potencia supera la contratada entra en funcionamiento cortando el suministro eléctrico.

El CUPS (Código Universal del Punto de Suministro) es un código único e identificador de un punto de suministro de ENERGÍA, ya sea de electricidad o gas canalizado, en España. Comienza con la secuencia ES, más otros 20 caracteres, cifras o letras. Se utiliza para identificar cada suministro ante compañías suministradoras, distribuidoras, comercializadoras, administración estatal, comunidades autónomas, etc.

En cumplimiento de la normativa europea, se introduce la separación de la tarifa de acceso en dos componentes: peajes y cargos.

Los peajes son precios regulados destinados a recuperar los costes de las redes de transporte y distribución, y son determinados por la CNMC.

Los cargos son los precios regulados destinados a cubrir el resto de costes regulados, tales como la financiación de las renovables, el sobrecoste de producción de energía en los territorios no peninsulares o las anualidades del déficit. Estos son determinados por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

• uno
• due tre

La factura del suministro de electricidad se compone de varios conceptos:

• El coste de la energía.
• Los costes regulados, que incluyen entre otros el coste de las redes de transporte y distribución, al fomento de las energías renovables, al mayor coste de producción en los sistemas no peninsulares, las anualidades para recuperar el déficit de tarifas. Estos costes se incorporan en lo que actualmente se denomina tarifa de acceso.
• El margen para la comercializadora por los servicios prestados.
• Alquiler del equipo de medida.
• Impuestos.

Sin ningún problema. Puedes cambiar la cuenta corriente siempre que lo desees, y el nombre del titular y la potencia contratada siempre que tu Boletín Eléctrico tenga menos de 20 años.

Es la parte variable de tu factura. Para calcular este coste no hay más que multiplicar el consumo realizado por el precio aplicado por kWh (según tu tarifa). Por ejemplo, si el consumo es de 100 kilovatios hora (kWh), considerando que el precio del kWh está fijado en 0,142319 euros, el coste será de 14,23 euros

Es un importe fijo en tu factura. Esta parte la recaudamos en nombre de la empresa distribuidora. Esta empresa cobra por utilizar sus redes eléctricas y permitir que la luz llegue hasta tu hogar. Este importe se abona siempre, se realice o no consumo en ese período. El precio por kW contratado lo define el gobierno y multiplicándolo por la potencia que tengas contratada te dará el importe a pagar. Recuerda que podrás tener diferentes potencias contratadas a lo largo del día para poder optimizar mejor tus consumos.

Se trata de un impuesto recaudado en concepto de obtención de ingresos para ayudas a la minería del carbón. Este impuesto se aplica sobre la suma del término de energía más el término de Potencia, y se suma a la base imponible para el cálculo del IVA.

Habitualmente el contador es propiedad de la distribuidora, y se paga por su alquiler correspondiendo al período que se factura. En nuestro caso, como comercializadora que somos, recaudamos este importe para la distribuidora. En tu factura encontrarás detallado el coste de este alquiler mensual.